En diversas fechas de éste segundo semestre del año 2014 me han escrito educadores con la preocupación sobre las ventajas y desventajas de continuar fomentando el uso de la lectura en “libros de papel” o en “libros digitales”. El truco para ser un buen lector, sin importar el medio, es ser un buen lector, un hecho que señala Mark Pennington, investigador de lectura en California, citado por Holly Korbey el 9 de septiembre 2014 en Mindshift, «Está bastante claro que los buenos lectores son lectores activos comprometidos con el texto» .
- Para responder a la pregunta de nuestros lectores es bueno hacer referencia a la diferencia entre i- el uso del Libro de Texto – cuasi obligatorio – que se usa en cada asignatura de cada grado (o del texto integrado) , en cualquiera de sus formas (papel o digital) y sus respectivos cuadernos de trabajo, y ii- sobre los libros de lectura , también cuasi obligatorios, que se recomiendan o se dan como obligatorios en cada grado y asignatura. En este contexto se usa más en el formato digital el libro de lectura y en papel se utiliza más el libro de texto.
- También es necesario diferenciar acá entre la escuela pública y la privada. En general en la educación pública los profesores prefieren que el texto y los cuadernos de trabajo sean en papel (hay también una fuerte presión de las Editoras para mantener esa costumbre y vender más textos cada año) mientras que en la educación privada de avanzada se ha ido aceleradamente introduciendo los libros de texto y los cuadernos de trabajo en formato digital, combinado con textos de altísima calidad elaborados por autores muy reconocidos del mundo, en su formato tradicional, pero combinado, por ejemplo el uso de los Cuadernos de trabajo (workbooks) en digital. El uso del Libro de Lectura, generalmente complementario en literatura o cualquier otra disciplina, hay una tendencia a usarlo en su formato digital.
- Desde la perspectiva del estudiante, debemos de tener presente que el estudiante hoy está más acostumbrado a leer y asimilar en su cultura digital, ya que desde su hogar, desde la interacción con sus amigos y familiares, ellos leen y responden usando sus computadoras portátiles, sus “smarphones”, sus “tablets” , leen todos los mensajes de texto , los mensajes por chat, leen en Instagram , Facebook y todo medio disponible. Cuando el estudiante llega al Centro Educativo ya trae un conocimiento previo en la lectura y generalmente –por ser textos pequeños- su comprensión es alta.
- Hay también una diferencia según el nivel educativo que curse el estudiante y la finalidad de la lectura . Entre más alto es el nivel educativo, más predisposición a usar la lectura digital, pero ojo, si la finalidad es prepararse para un examen o un test tanto los estudiantes de colegios como de universidades prefieren estudiar, marcar, hacer anotaciones, subrayar y poner notas en papeles de colores sobre los libros impresos en papel.
En consecuencia durante muchos años aún coexistirán los libros de texto y libros de lectura tanto en el formato de papel como en el formato digital, aunque éste cada día será más utilizado en todos los niveles educativos, modalidades, especialidades y asignaturas.
Sin embargo, seguimos con el gran problema: nuestros estudiantes leen muy poco y comprenden también poco de lo poco que leen. Fomentar el gusto por aprender, por leer, desarrollar el gusto por aprender es el gran reto del presente.
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